Condiciones extremas en planetas

Aquí en nuestro Sistema Solar existen algunas condiciones climáticas realmente extremas. Neptuno, por ejemplo, es el planeta con los vientos más fuertes de nuestro sistema planetario. En Neptuno, los vientos pueden alcanzar velocidades de 2.200 km/h. Eso equivale a 1,8 veces la velocidad del sonido, un 60 por ciento más rápido que una bala 9mm, e incluso más rápido que un jet caza F-35.

Neptuno

A 63 años luz de distancia de la Tierra se encuentra un planeta masivo llamado HD 189733 b. En este planeta, los vientos alcanzan velocidades de 8.690 km/h, unas 18 veces más rápido que los vientos más fuertes registrados en la Tierra.

Pero la característica más extrema de dicho mundo es que también llueve vidrio derretido sobre su superficie. Con vidrio lloviendo de costado a velocidades de miles de kilómetros por hora, es difícil imaginar que algo podría sobrevivir allí.

HD 189733 b

Luego tenemos a Gliese 436 b, un planeta a 33 años luz de distancia de nosotros. Este planeta es masivo y se encuentra muy cerca de su estrella. Por esta razón, la temperatura en la superficie del planeta es de unos 440 grados Celsius. Lo más increíble es que Gliese 436 b está cubierto por un profundo océano de agua.

Debido a la gravedad extrema del planeta, dicha agua no se encuentra en estado líquido ni gaseoso, sino sólido, más sólido que el hielo en la Tierra. De hecho, el agua allá está tan comprimida que se encuentra en la forma de un material cristalino más duro que la roca, llamado Hielo VII. Así que Gliese 436 b es un planeta cubierto de hielo ardiendo a cientos de grados.

Gliese 436 b

CoRoT-7b, un exoplaneta ubicado a 489 años luz de la Tierra, es radicalmente diferente a cualquier planeta en nuestro Sistema Solar. Este planeta orbita muy cerca de su estrella, lo que se traduce en altas temperaturas en su superficie. Si también consideramos que el planeta es rocoso y se encuentra anclado gravitacionalmente (es decir, que siempre da la misma cara a su estrella), entonces CoRoT-7b es literalmente un planeta de hielo y fuego.

Mientras un lado del planeta está tan caliente como el infierno, con temperaturas de hasta 2.600 grados Celsius, el lado oscuro del planeta tiene temperaturas tan bajas como -212 grados Celsius. Ah, y como si eso no fuera suficiente, los científicos creen que en en CoRoT-7b también llueven rocas.

CoRoT-7b